Plum Brook, Sandusky, Ohio, 26 de noviembre de 2019: la nave espacial Orion despegó a bordo de un avión Super Guppy desde el Centro Espacial Kennedy el domingo 24 de noviembre, con destino a la cámara de vacío térmico más grande del mundo, propiedad de la NASA y donde comenzará la fase de prueba en caliente durante varios meses para el Spacecraft. El Super Guppy aterrizó en Mansfield (Ohio), y el traslado a la estación Plum Brook en Sandusky está programado para hoy martes 26 de noviembre.
Un equipo de ingenieros y técnicos de Airbus, la Agencia Espacial Europea (ESA), Lockheed Martin y la NASA están listos para someter la nave espacial a las simulaciones de las extremas condiciones espaciales.
«Con las pruebas mostraremos que los sistemas de la nave espacial funcionan según lo planeado, y al mismo tiempo garantizarán la operación segura para los astronautas en las futuras misiones, tanto en tierra como a bordo», Matthias Gronowski, ingeniero jefe del módulo de servicio europeo. que Airbus está construyendo para la NASA en nombre de la ESA.
Las pruebas se llevarán a cabo en dos fases en la cámara de vacío más grande del mundo, en el Centro de Pruebas Glenn de la NASA (Plum Brook, Ohio). Inicialmente dará inicio una prueba térmica de 63 días de duración. Los sistemas eléctricos del Orion se encenderán y operarán bajo vacío y a temperaturas que simulan las condiciones ambientales en el espacio.
Durante esta fase la nave espacial estará expuesta a temperaturas extremas de aproximadamente -115º a +75º Centígrados para reproducir las condiciones a las que estará expuesta, tanto bajo la luz solar directa como a la sombra, en el espacio.
La segunda fase es una prueba de compatibilidad electromagnética, que durará aproximadamente 14 días. Cada componente electrónico emite un tipo de campo electromagnético que puede afectar el rendimiento de otros dispositivos electrónicos cercanos. Estas pruebas aseguran que la electrónica de la nave espacial funcione correctamente durante las misiones.
«Este es un hito muy importante para el viaje a la Luna», dice Gronowski. «El equipo internacional ha estado trabajando para lograr este objetivo durante tres años, y en los últimos meses hemos conectado mecánica y eléctricamente el Crew Module (cápsula de los astronautas) y el Módulo de Servicio Europeo en el Centro Espacial Kennedy. Lo que importa ahora es que podremos demostrar que el módulo de servicio funciona en las extremas condiciones del espacio».
Después de las pruebas, la nave Orion regresará al Centro Espacial Kennedy (NASA), donde comenzarán a realizar más ensayos y los preparativos para su integración con el nuevo cohete Space Launch System (SLS), antes del lanzamiento del Artemis I a finales del próximo año.
El módulo de servicio europeo de la ESA proporcionará propulsión, energía, aire y agua a los astronautas, así como el control térmico de toda la nave espacial. El primer lanzamiento, sin astronautas, está planeado para final del 2020. Artemis viajará una vez alrededor de la Luna y regresará a la Tierra.
Airbus en Bremen ya está construyendo el segundo Módulo de Servicio de Orión, con el cual los astronautas volarán a la Luna y regresarán a la Tierra por primera vez (esta misión espacial se realizará en 2022 o 2023).