EAST HARTFORD, Conn., 21 de febrero de 2022 — Pratt & Whitney ha sido seleccionada por el DoE (U.S. Deparment of Energy) para desarrollar una nueva tecnología de alta eficiencia de propulsión a base de hidrógeno para la aviación comercial. Ésta será parte de ARPA-E (Advanced Research Projects Agency-Energy).
El proyecto HySIITE (Hydrogen Steam Injected, Inter-Cooled Turbine Engine) utilizará combustión de hidrógeno líquido y recuperación de vapor de agua para lograr cero emisiones de CO2, reduciendo al mismo tiempo las emisiones de óxido de nitrógeno (NOx) hasta en un 80% y el consumo de combustible hasta en un 35%, inicialmente destinado para la próxima generación de aviones de un solo pasillo.
“Ésta es realmente una gran oportunidad para comenzar a desarrollar tecnologías clave que podrían llevar el primer motor con inyección de vapor de hidrógeno a la industria, desde el concepto a la realidad. Durante casi 100 años, Pratt & Whitney ha estado a la vanguardia en tecnologías de innovación para mejorar continuamente la eficiencia de los motores de aeronaves, estamos encantados de haber sido seleccionados para trabajar en lo que podría ser la próxima y revolucionaria tecnología de propulsión para la aviación”. Geoff Hunt, Vicepresidente Senior de Ingeniería y Tecnología en Pratt & Whitney.
La turbina HySIITE quemará hidrógeno en un ciclo de motor termodinámico que incorpora inyección de vapor para reducir drásticamente las emisiones de NOx, un gas de efecto invernadero. La arquitectura del sistema semicerrado planificada para el HySIITE logrará una eficiencia térmica mayor que las celdas de combustible, y reducirá los costes operativos totales en comparación con el uso de SAF. Ésta es la primera colaboración directa entre Pratt & Whitney y ARPA-E.
“Pratt & Whitney acumula un largo legado con la propulsión alimentada por hidrógeno, y estamos entusiasmados de avanzar en esta emergente tecnología como parte de nuestra estrategia integral para respaldar el ambicioso objetivo de la industria de la aviación, con el objetivo de lograr cero emisiones netas de CO2 en los aviones para el 2050. Las asociaciones con agencias públicas como el Departamento de Energía (DoE) tienen un papel vital para desarrollar y madurar tecnologías que podrían tener un impacto global en la reducción de la huella ambiental de la aviación”. Graham Webb, Director de Sostenibilidad de Pratt & Whitney.
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